El sueño es un proceso activo y con función universal que principalmente se relaciona con la codificación y consolidación de la memoria, plasticidad cerebral y aprendizaje motor. Esta formado por varios ciclos repetidos de forma secuencial y se organiza en etapas dependiendo de su profundidad, estas son el sueño MOR (movimientos oculares rápidos ) que corresponde al 20-25% del sueño y sueño NoMOR.
Este trabajo se centrara en el sueño MOR. Las características de este son:
- Movimientos oculares rápidos.
- Actividad cerebral parecida a la vigilia.
- Atonía muscular (perdida del tono muscular) excepto en el diafragma y músculos oculares externos.
La parálisis del sueño estaría dentro de los desordenes del sueño, ya que se trata de una intrusión al sueño MOR, mas concretamente dentro de la categoría de parasomnias. La parálisis del sueño se define como la aparición de parálisis con incapacidad para moverse voluntariamente en el que la conciencia, el recuerdo y la respiración se mantienen. Durante la parálisis del sueño también pueden presentarse alucinaciones relacionadas con la presencia de sueños en el momento de la irrupción del sueño MOR. Se da en las fases predormiciales o postdormiciales, tiene una duración de uno a varios minutos y acaba espontáneamente, moviendo los ojos o con estimulación externa. Se trata de un fenómeno que puede aparecer aislado o repetido sin ser patológico o puede estar ligado a la genética familiar o a la narcolepsia.
Es un fenómeno frecuente ya que aparece con un porcentaje del 40-50% en sujetos normales y puede ser una experiencia que se vive con ansiedad y puede llevar a tener sensación de vulnerabilidad y terror.
Los factores internos de esta parasomnia se deben a una desconexión entre los mecanismos que mantienen el estado de alerta (estar despierto) con los que median la relajación muscular de la fase MOR. Es algo así como que la persona esta despierta pero el cuerpo permanece en la parálisis propia de la fase MOR.
Dentro de los factores externos predisponentes se encuentran la depresión, estrés, situaciones de cansancio, mala higiene del sueño, bebidas estimulantes o jetlag.
La parálisis del sueño, en general, no se considera como algo grave por lo que no se suele tratar, si se trata de un caso en el que estos episodios producen malestar, desde la psicología, el abordaje mas efectivo hasta ahora sobre la parálisis del sueño ha sido la psicoeducación sobre unos hábitos de sueño adecuados, toma de conciencia de la persona sobre la naturaleza benigna del trastorno y las condiciones en las que se da.
Bibliografía:
- Carrillo-Mora, P. Barajas-Martínez, K.G. Sanchez-Vazquez, I. Rangel-Caballero. M.F.(2018). Trastornos del sueño: ¿Qué son y cuales son sus consecuencias?, Revista de facultad de medicina UNAM, 61(1).
- Cueva, J.E. (2011). Parálisis del sueño, BUN synapsis, 3 (2).
- Iriarte, J. Urrestarazu, E. Alegre, M. Viteri, C. Artieda, J. (2005). Parasomnias: episodios anormales durante el sueño, Revista de medicina de la universidad de Navarra, 49, 46-52.