El rápido aumento de infectados por el virus Covid-19, ha supuesto una crisis sanitaria sin precedentes. Para tomar medidas de contención y evitar la saturación del sistema sanitario y, de paso, evitar que las personas más vulnerables queden afectadas, se han decretado medidas de cuarentena obligatoria. El miedo es una reacción natural, ya que supone enfrentarse a un “enemigo” del que hemos escuchado muchas cosas pero que no vemos. Por ello, se han visto imágenes tan impactantes como baldas vacías en los supermercados y largas colas para comprar víveres para guardar en casa en previsión de una larga cuarentena. Con imágenes como esta, ¿cómo no se va a asustar parte de la población por lo que imagina que se puede avecinar?
Esto supone un cambio enorme en nuestras costumbres y rutinas. Puede ser algo angustiante, ya que implica no salir a la calle en un soleado día festivo, tener en mente medidas básicas de higiene, no ver a los amigos o familiares, tener que trabajar desde casa, hacerse cargo de los hijos de forma imprevista, etc.
Para ello, en este artículo, se quieren dar pautas sencillas para afrontar estos días de una manera más llevadera y cuidar de la salud mental.
- Mantener horarios y rutinas. Cuando se trabaja desde casa sin estar acostumbrado a ello, puedes ser complicado para algunos distinguir claramente entre el ocio y el trabajo. Por ello, se recomienda seguir con las rutinas horarias de sueño, comida, descanso y ocio. Respecto a esto último, habría que remarcar que trabajar desde casa no significa tener que estar pendiente del ordenador o e-mail del trabajo más horas de lo habitual. Los descansos son importantes y realizar actividades deportivas en casa es una opción muy viable si uno está acostumbrado a ello.
- Tratar de distinguir los espacios de trabajo y de ocio. Siguiendo la línea anterior, remarcar que sería interesante distinguir los espacios de la casa que se van a utilizar para trabajar de los usados habitualmente para el ocio. El espacio de trabajo debería ser un lugar de la casa que habitualmente no utilicemos como espacio de ocio.
- Vestuario. Un aspecto que quizás puede preocupar a mucha gente es la monotonía. Una recomendación sería tratar de vestirse de manera diferente cada día para que los días no se asemejen unos a otros. Incluso puede usarse para distinguir el horario laboral del ocio, al hilo de lo dicho anteriormente.
- No estar pendiente constantemente de las noticias. Es cierto que es conveniente estar al tanto de la información que nos llega desde los medios de comunicación o las redes sociales. Se entiende que es una situación excepcional y se ha visto que las circunstancias evolucionan de una manera rápida. Pero, a pesar de ello, uno tiene que poner límites en la información que recibe y no buscar constantemente información sobre ello. Esto puede crear una situación de miedo irracional, incrementar la angustia y, por ende, puede desencadenar ansiedad. Puede llevar a que uno considere que tiene los síntomas que tanto se describen en los medios sin que esto sea cierto. Por lo tanto, el autoconocimiento y saber cuáles son los límites de cada uno, es esencial.
- Contrastar la información que llega desde las redes sociales. Hoy en día, las redes sociales, son el medio más rápido para difundir información. Pero, es bien sabido que los mensajes encadenados pueden derivar en la difusión de hechos que no son veraces. Hay que tratar de ser crítico con las noticias que llegan y no asumirlas como ciertas de entrada. Esto solo contribuye al aumento de la ansiedad.
- Compartir con los demás los pensamientos o los miedos. En una situación en la que no podemos predecir de manera segura que ocurrirá en el futuro, pueden ir surgiendo miedos o dudas. La incertidumbre es un peso difícil de llevar y, por ello, es esencial compartirla con personas de confianza para aliviar la carga emocional.
- Estar en contacto con la gente del entorno a través de redes sociales. Siguiendo el anterior punto, hoy en día la tecnología posibilita muchas maneras de estar en contacto con los demás.Es el momento ideal para comunicarse a través de diversas redes (watsap, videollamadas etc.) y no sentir la distancia con las personas importantes.
- Distraerse. Si las circunstancias lo permiten, es un buen momento para dedicarse a los hobbies que uno deja de lado por falta de tiempo. Para combatir la monotonía, es importante buscar estímulos gratificantes. Hay muchas opciones a parte de las series y películas que puede ser útiles para afrontar estos tiempos tan difíciles (lectura, manualidades, pintura etc.). En este sentido, se puede ver como una oportunidad.
- Humor. Utilizar el humor para afrontar la situación y no darle un tono serio a lo que ocurre, es una manera muy saludable de proteger la salud mental de cada uno.
- Es importante cuidar la salud física. En caso de considerar que se tiene los síntomas descritos por la OMS, hay que ponerse en contacto con los teléfonos destinados a ello y proteger a los demás. De la misma manera, tratar de cumplir las directrices trasmitidas de manera oficial para evitar ser contagiado.
Se entiende que son momentos complicados. Desde la perspectiva de la salud mental, se recomienda buscar ayuda profesional si se presentan síntomas de ansiedad, angustia o desesperanza. Recordad que desde Piscología Amorebieta se ofrecen servicios de atención psicológica online en caso de necesitarlo.