Hace unas semanas escribimos una introducción sobre el mindfulness ver aquí, donde citamos algunas actitudes que se desarrollan con la práctica. A continuación, añadiremos una pequeña explicación sobre cada una de ellas:
1. Atención al momento presente: El centrarse en el momento presente supone dejar de estar pensando en el pasado (rumiaciones) o en el futuro (expectativas, deseos, temores). La atención puede ir dirigida a atender a los propios procesos internos (emociones, sensaciones, pensamientos) y/o se puede centrar en la tarea que se está realizando.
2. Apertura a la experiencia: Consiste en observar lo que ocurre con curiosidad, como si fuera la primera vez, procurando que no interfieran las propias creencias.
3. Aceptación: En ocasiones, procuramos evitar las experiencias desagradables. Sin embargo, aceptar que son experiencias ocasionales y limitadas en el tiempo nos ayuda a experimentar la experiencia tal como es, sin incurrir en conductas desadaptativas como podría ser la evitación.
4. Dejar pasar: Consiste en desprenderse, desapegarse de algo o de alguien. A veces, erróneamente creemos que cuanto más poseamos, cuanto más controlemos, cuanto más consigamos… más felices seremos. Tendemos a apegarnos a objetos, relaciones, al poder… Sin embargo, en el mundo material (personas, objetos), todo permanece un tiempo y después desaparece.
5. No juicio: Darnos cuenta de que enjuiciamos continuamente nos permite comprender y, por tanto, actuar con mayor coherencia y libertad.
6. Paciencia: La paciencia permite estar atento, escuchar, hablar y ser cuidadoso con las acciones y decisiones.
7. Compasión: Se trata de observar con una actitud amable.
Además, me gustaría añadir que hay diferentes tipos de prácticas dependiendo en dónde se ponga el foco o atención:
A.Prácticas de atención focalizada: En este tipo de prácticas se centra la atención en un estímulo específico, como puede ser la respiración. Al darnos cuenta de que nuestra atención se distrae volvemos a dirigirla hacia el estímulo específico.
B.Prácticas de atención abierta: En estas prácticas, se observa cualquier evento mental al que ni se reacciona, ni nos apegamos; se observan los eventos sin implicarse con ellos.
C.Prácticas de autocompasión/compasión: En las prácticas de compasión se pone el foco los sentimientos de bondad y amor; bien hacia nosotros, bien hacia los demás. También, se observan las similitudes entre “yo” y el “otro”, entre uno mismo y las demás personas (humanidad compartida).
Por último, quiero señalar que las prácticas pueden ser formales o informales. Son formales cuando la persona se prepara para realizarla; es decir, elige un lugar, adopta una postura, etc., y se pone a ello. Sin embargo, se habla de prácticas informales cuando en la vida cotidiana se lleva la atención hacia la actividad que se realiza (mientras nos limpiamos los dientes, cocinamos…).
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