La proyección es un tipo de mecanismo de defensa y antes de pasar a explicar la proyección vamos a hacer un pequeño apunte sobre que son estos mecanismos. Los mecanismos de defensa son maneras de funcionar y manejar los pensamientos, fantasías y sentimientos negativos o dolorosos. Son procedimientos que todos usamos para intentar mantener un equilibrio emocional, intentando mantener alejados de la consciencia pensamientos muy angustiantes. Todas las personas usamos mecanismos de defensa, la dificultad viene del uso abusivo de ellos y más específicamente de alguno de ellos… ya que esta situación nos estaría haciendo vivir cada vez más alejados de la realidad. El trabajo en la consulta ayuda a poder identificar estos mecanismos para así entender como funcionamos y poder hacer frente a esto de lo que nos defendemos a través de estos mecanismos.
Hoy vamos a hablar de la proyección, es un mecanismo muy común que usamos más de lo que creemos y estoy segura que el lector se va a sentir identificado con alguna de las situaciones que vamos a exponer. Se considera proyección cuando la persona atribuye al otro: deseos, sentimientos, emociones, necesidades, defectos que no podemos aceptar como propios. Es decir, el que proyecta rechaza algunos aspectos de sí mismo y se los adjudica a otro.
En ocasiones utilizamos la proyección para protegernos de emociones que nos resultan difíciles de sentir. En pareja es muy común ver como en ocasiones colocamos el enfado en el otro cuando los que realmente estamos enfadado somos nosotros mismos. En vez de mirar, aceptar el porqué de nuestro enfado, intentamos justificar nuestro estado emocional responsabilizando al otro por ello. Otro ejemplo sería cuando dejamos a nuestro hij@s en el colegio y decimos la frase “se ha quedado triste” es realmente el niño el que se ha quedado triste o es la madre/padre el que se siente triste por tener que separarse de su hij@.
También es común usar la proyección cuando rechazamos rasgos o aspectos de nuestra personalidad. Esto también suele apreciarse habitualmente en la pareja, cuando por ejemplo sentimos celos. Es realmente la otra persona la que realiza conductas inadecuadas o existe en nosotros mismos deseos o sentimientos hacia otras personas. En esta situación estos deseos intentarían ser tapados por ser inaceptables para nosotros mismos, pero en busca de sentir cierto alivio emocional lo que hacemos es ponerlos en nuestra pareja como forma de aliviar la culpa.
Y para terminar os dejo una cita que habla de algo tan habitual y común como es la crítica. Sería bueno que cada uno en su propio análisis personal pueda hacer reflexión de que hay de uno mismo en las críticas que vierte sobre los demás.
Todo lo que nos irrita de los demás, nos puede ayudar a entendernos a nosotros mismos (Carl Jung)